Los vestidos de lactancia no sólo están cortados para dar el pecho de una manera más cómoda y rápida, sino también para disimular nuestro contorno después del parto hasta que recuperemos totalmente la figura. Los vestidos de lactancia no se pegan al cuerpo, su corte es suelto y está cortado para hacernos parecer más altas y estilizar.
También hay vestidos de embarazo que se pueden utilizar tranquilamente después, así como con corte especial para lactancia y disimular la tripilla postparto.
Los vestidos de embarazo ya no tienen porque durar sólo 9 meses, están realizados con tejidos densos de alta calidad para usarlos como nuevos todo el tiempo que quieras, es como seguir comprado tu ropa de siempre, pero adaptada a esta nueva fase irrepetible de tu vida, ¡el embarazo!