Como la piel del recién nacido es tan fina y delicada lo mejor es comprarle prendas que al tacto ya sean muy suaves y mejor si son de fibras naturales como el algodón. También es recomendable que este algodón sea orgánico, es decir que contenga la menor cantidad de productos químicos posibles, de esta manera garantizamos que no se produzca ningún tipo de alergia en su delicada piel.
La cantidad y tipo de ropa variará de la estación, para verano unos sencillos bodies de manga corta es una opción ideal, también puedes adquirir un para de conjuntos fresquitos de pantaloncito con pies y jersey de algodón dependiendo de la temperatura.
Para cubrir al bebé en verano son ideales las muselinas ¡un gran acierto!, son muy fresquitas y muy útiles para tener siempre a mano, se lavan con facilidad y son casi imprescindibles. Las hay muy chulas con diferentes estampados y también está la clásica muselina blanca que suelen venir en un pack de 6 muy cómodo para tener en el cochecito, en la cuna, en el moises…
En invierno si que ya necesitaremos mucha más ropa y más abrigosa, aunque como siempre que en su composición lleve fibras naturales como el algodón o la lana que dejen transpirar la piel del bebé.
Cuando nacen es adecuado tenerle un par de manoplas y un gorrito, así como varios bodies de manga larga o corta según elección, pijamitas de algodón y cómodos trajes para estar acostados sin que les moleste su ropita. Si la ropa está confeccionada con costurita francesa es ideal, ya que de esta manera las costuras no dejarán marcas en el cuerpo del bebé.
Para cubrirlos en la cuna o cochecito las mantitas y arrullos que en su composición lleven cálida lana son ideales. También que se puedan lavar fácilmente y que queden como nuevas, vale la pena gastar un poco más en estas prendas ya que las van a usar bastante.
En mucho países utilizan este tipo de saquito para envolver a los bebés nada más nacer, en España no se utilizan tanto, pero las mamás que los prueban dicen que son muy confortables para el bebé, que los hace sentir como si todavía siguieran en el útero materno. Casi siempre están fabricados en algodón y son lo sufiententemente flexibles para no cortar los movimientos naturales del bebé.
Ya veis que con pocas prendas pero de buena calidad y muy prácticas ya podemos vestir al bebé durante sus primeros meses.
Ellos no necesitan mucho más, ¡aparte de todo nuestro amor por supuesto!