Torre de Aprendizaje de Madera

El Asistente de Cocina Infantil, también conocido como Torre de Aprendizaje, es una herramienta práctica y educativa que enriquece la experiencia culinaria de los niños, garantizando su seguridad y comodidad mientras trabajan en la cocina. Diseñado específicamente para los más pequeños, permite a los niños participar activamente en actividades culinarias y desarrollar habilidades gastronómicas desde una edad temprana.

Características Principales:

• Plataformas Ajustables: La altura de la plataforma es ajustable para adaptarse a la estatura del niño y la altura de la encimera de la cocina.
• Diseñado para Niños Pequeños: Permite a los niños participar de manera segura y cómoda en actividades de cocina, fomentando el desarrollo de habilidades culinarias.
• Construcción Estable: Fabricado con madera de pino de 1ª clase, asegura estabilidad y durabilidad. Incluye barandillas protectoras que evitan caídas accidentales y bordes perfectamente pulidos.
• Materiales de Alta Calidad: Compuesto por madera de pino de 1ª clase y metal, en color natural.

Especificaciones:

• Material: Madera de pino de 1ª clase y metal.
• Color: Pino natural.
• Edad Recomendada: A partir de 2 años.
• Peso Máximo del Usuario: Hasta 50 kg.
• Plataforma Ajustable a Alturas de: 20.5 cm, 36.5 cm, 60 cm.
• Dimensiones Externas: 46 x 37 x 86 cm.
• Peso: 7.5 kg.
• Peso en Paquete: 8 kg.

Incluye:

• Asistente de cocina para montaje.
• Kit de montaje.
• Instrucciones.

Gracias a este asistente, los niños pueden participar en diversas actividades de cocina como mezclar, cortar (bajo supervisión) o disponer ingredientes, lo que ayuda a desarrollar la coordinación motora, la independencia y el interés por la cocina. Además, pueden participar activamente en la preparación de comidas, facilitando el tiempo en familia y el aprendizaje conjunto. La experiencia práctica fomenta el interés por la alimentación saludable y la cocina. La torre también se puede utilizar para diversas actividades educativas, como pintar, dibujar o resolver puzzles. Los niños mayores pueden intentar recetas simples bajo la supervisión de un adulto, desarrollando su creatividad.